Maestro

Maestro, tu que me acompañas por el duro camino del éxito,
Maestro, tu que me enseñaste a reír disfrutar la vida sin excesos;
Maestro, tu que me enseñaste el camino de la felicidad;
Y me libraste de caer en el vacío de la adversidad,
Maestro, por favor muéstrame la luz al final del túnel……..
……..maestro,
La salida.
La salida de este indescifrable laberinto
Lleno de llanto y el crujir de dientes,
Los dientes de los cuerpos sin alma, que habitan en este
Infierno.
Maestro…
Maestro, me enseñaste el camino y fui por el;
Me enseñaste a reír y lo hice;
Me enseñaste la felicidad,
Mas no me enseñaste que hacer si la perdía o si nunca la
Alcanzaba.
Que hago?.....
Escuche mi suplica maestro……..enséñeme

entre dioses y shinigamis

Mientras mi imaginación juega,
juega con su imaginación,
a esconderse de mi,
de si misma…
El viento frio parece cantar algo,
Confundiéndose con los sonidos
Desacordes del populacho.

Logro escuchar la muerte
Mientras toca su mas dulce
Y segadora melodía,
Que pensara la muerte en su aburrimiento,
O falta de creatividad;
Que hará un shinigamis
A falta de musas para su poema
Si es que acaso escribe..
Las nubes han de ser el papel
Y la sangre su tinta indeleble;
Los poetas son el reflejo de su alma.
Poetas y su locura,
O quizás real cordura…..
Damicelas coqueteando al aire
Caballeros de amores furtivos,
Origen del dolor poético…
….un dios se ríe desjuiciadamente
Cadáveres sembrados en la tierra,
Flores lanzadas al cielo,
El héroe llega con gloria a su patria;
El muerto soldado al país del olvido….
Un dios frota sus manos…sonríe
Todo es el deseo desinteresado de un dios,
Todo es el eco del poema de un shinigamis

creador de mundos

Cuantas veces intente el suicidio?
Infinidad de veces,
el resultado ha sido el mismo……. He fallado.
El albatros a caído precipitadamente,
cual rio al precipicio forma una cascada,
el ángel se ha marchado,
como se marchan las musa….en silencio,
cantando melodías sordas de su voz muda.
Azufre e incienso cubren la faz que me rodea,
las luces de neón se han apagado,
solo queda la luna…
y su llanto reflejados en n estanque.
Leyendas, poemas y sonetos,
mundos fascinantes y maravillosos,
otros asombrosos y terribles….
el que escribe es dios.
Banalidades mundanas que traspasan mi alma,
cual espada afilada mi pecho,
damiselas hermosas y seductoras
cual vino de la mejor cosecha,
medusas contemporáneas